Nuestro país obtiene una puntuación de 88,91 y se sitúa sólo por detrás de Finlandia, Islandia, Suecia, Dinamarca y Eslovenia. Por detrás están estados como Francia (10), Reino Unido (12), Suiza (16), Noruega (17), Austria (18), Canadá (25), EEUU (26) o Alemania (30).SegúnEnvironmental Performance Index (EPI) 2016, el desempeño ambiental de España ha mejorado en los dos últimos años, ya que ha ascendido en nueve puntos su registro. Además, esta puntuación ha mejorado un 10% en los últimos 10 años.

La puntuación global de cada país se calcula en base al análisis de cada uno de estos temas: clima y energía, biodiversidad y hábitat, pesca, bosques, agricultura, suministros de agua, impactos a la salud, calidad del aire y saneamiento de agua.

DETRÁS DE LAS CIFRAS

Pero no todo es de color de rosa en el medio ambiente de nuestro país. En el apartado ‘Clima y Energía’, el EPI señala que España ha caído ocho posiciones hasta la 41. Este apartado evalúa la disminución de la intensidad de carbono en base al objetivo global general de la descarbonización.

Germanwatch, el thinktank que elabora este ranking, señala que  «se han producido medidas políticas retroactivas que han arruinado la dinámica en el sector de las energías renovables”. «La recesión económica es el principal causante de la tendencia negativa en la intensidad de carbono de España y no las políticas aplicadas”, añade.

Debido a esta anomalía, el Environmental Performance Index sólo utiliza los datos de España correspondientes al periodo comprendido entre 2002 y 2008 para medir su tendencia en la intensidad de carbono. No hay que olvidar que en nuestro país el uso del carbón, la más contaminante de las energías fósiles para generar electricidad, ha aumentado en 2015 más de un 23% respecto al año anterior hasta representar el 20,3% de la energía eléctrica consumida, según REE.

Además, según la CE, las renovables sólo cubrieron el 15,8% del consumo final de la energía en España durante 2014. Además, durante los últimos años el aumento de la proporción de las renovables ha sido muy tímido. A este ritmo, no se llegaría al 20% hasta 2023, cuando el Gobierno ha asumido este objetivo para 2020. Sin embargo, según el último Informe de Situación de las Emisiones de CO2 en el Mundo, elaborado por la Fundación Empresa & Clima y presentado en 2015, durante 2013 las empresas españolas sujetas a Directiva redujeron sus emisiones de CO2 un 9,5%, lo que supone 122 millones de toneladas menos

CONCLUSIONES MUNDIALES

Entre las principales conclusiones del estudio, destaca que  más de 3,5 millones de personas -la mitad de la población mundial- viven en países con mala calidad del aire. En cambio, el número de personas que carecen de acceso a agua potable se ha reducido prácticamente a la mitad, desde los 960 millones en 2000 a 550 millones en la actualidad, en torno 8 por ciento de la población mundial. Un total de 2,4 millones de personas no tiene accedo a servicios de saneamiento.

En 2014, el planeta perdió 6. 252 millones de km2 de su cubierta forestal, un área equivalente a dos veces el tamaño de Perú. Otro resultado alarmante: más del 80% de las aguas residuales vertidas en el mundo no reciben ningún tipo de tratamiento. Sin embargo, la intensidad del carbono está comenzando a disminuir ligeramente a nivel mundial.

Fuente: www.corresponsables.com